Una vez que se identifica EHS, es esencial reducir la temperatura corporal central del paciente mediante una modalidad de enfriamiento, como CWI, antes de transportar al paciente al hospital.,,, Aunque es importante ponerse en contacto con EMS cuando se identifica por primera vez EHS, la temperatura corporal central del paciente debe alcanzar al menos 102 °F (39 °C) antes del transporte al hospital, siguiendo así el mantra de “enfriar primero, transportar después”.,, La medición de la temperatura rectal es fundamental para que el enfriamiento primero y el transporte segundo sean efectivos, ya que este importante signo vital evitaría que el paciente sea transportado demasiado pronto, que es una de las causas más comunes de muerte por EHS. La tasa de enfriamiento adecuada para CWI debe ser de aproximadamente 0,2 °C/min (0,37 °F/min) o aproximadamente 1 °C cada 5 minutos (o 1 °F cada 3 minutos) cuando un AT está considerando todo el período de CWI desde el punto de vista de un atleta. colapso para el transporte. En el presente caso, la CWI fue extremadamente eficaz para reducir la temperatura central del paciente, ya que la velocidad de enfriamiento fue de aproximadamente 0,41 °F/min (0,25 °C/min). Este paciente mostró una velocidad de enfriamiento superior a la media con CWI, lo que podría deberse a una combinación de factores, como el tamaño pequeño del paciente, suficiente hielo y agua disponibles y agitación continua del agua durante el enfriamiento. El objetivo general del enfriamiento inmediato es reducir la temperatura central del cuerpo por debajo del umbral crítico de 40,5 °C (105 °F) dentro de los 30 minutos posteriores al colapso y preferiblemente a 39 °C (102 °F) antes del transporte. Esta temperatura ayuda a prevenir el daño celular y las complicaciones a largo plazo que pueden ocurrir cuando la temperatura corporal central permanece peligrosamente elevada durante un tiempo prolongado. En este caso, el AT y la política establecieron que se enfriaría al paciente hasta que la temperatura central del paciente alcanzara al menos 102 °F (39 °C) antes del transporte de EMS. Afortunadamente, cuando llegó el servicio de emergencias médicas, la temperatura de la paciente estaba por debajo de los 102 °F y, por lo tanto, era seguro sacarla de la bañera. Si el EMS hubiera llegado antes, la medición de la temperatura de la paciente por parte del AT habría respaldado la explicación al personal del EMS de por qué necesitaría continuar enfriándose antes del transporte. Se recomienda que los AT hablen con su personal de EMS local sobre sus políticas y procedimientos de EHS para establecer una comunicación efectiva, tal como lo hacen los AT con respecto a una sospecha de lesión en la columna. En este caso, el AT también siguió su protocolo EHI escrito, que incluía configurar una tina CWI por adelantado. Este equipo permitió que el paciente se enfriara en el sitio antes del transporte. En este informe de caso, demostramos la importancia de tener políticas y procedimientos escritos, el equipo necesario en el sitio y un EAP.
Prácticas de rehabilitación y evaluación después de una lesión del ligamento cruzado anterior: una encuesta de fisioterapeutas australianos
Resumen Objetivo: Este estudio tuvo como objetivo investigar las creencias y prácticas actuales entre los fisioterapeutas australianos con respecto al tratamiento de las lesiones del ligamento cruzado anterior (LCA). Diseño: Encuesta transversal. Configuración:...